Durante el proceso, los Messi deberán responder por 3 delitos de fraude fiscal de un total de 4.61 millones de dólares correspondientes a sus derechos de imagen entre 2007 y 2009 que habrían sido ingresados a través de empresas pantalla en Belice y Uruguay, considerados paraísos fiscales en esa época. Aunque la fiscalía se mostró contraria a juzgar al delantero argentino, el juez instructor decidió seguir finalmente el criterio del abogado del Estado, defensor de los intereses de la administración tributaria supuestamente defraudada, que reclama 22 meses y medio de prisión para cada uno de ellos. El juicio empezará el martes 31 de mayo y se alargará hasta el viernes 3 de junio. El proceso no afectará a su calendario con el
FC Barcelona que, como máximo, terminaría su temporada el 28 de mayo con la final de la Liga de Campeones en caso de alcanzarla. En cambio, puede afectar a su participación con la selección argentina en la edición especial de la
Copa América en motivo de su centenario que empezará el 3 de junio, aunque
la albiceleste de Messi no debutará hasta tres días más tarde, el 6 de ese mes.