Según un usuario de Twitter, la escritora había planeado una escena en la segunda parte del libro, en la cual Harry viviría su primera experiencia sexual, sin embargo debio descartarla luego que un editor indicara que esto podría molestar a los padres de los lectores más jóvenes.
Ante esto, Rowling respondió que nunca existió tal escena. ‘Nunca la escribí, nunca la anuncié y nunca la envié a edición, así que básicamente es lo que nosotros los británicos llamamos’ un montón de basura», escribió.